NEGRO

Negro mi mar hoy.
Negro como los jirones de mi alma.
Negro mi pelo y negros mis ojos.

Lame la arena negra que corrompen mis pies.
Bajo un negro cielo cegado de tormentas.
Contemplando a lo lejos los restos de mi naufragio.
Se obstina la espuma en salpicar mi ánimo,
manteniéndose alba a pesar del espectáculo
y la afrenta del negro salado de mis lágrimas.

Mi cuerpo depuesto,
mascarón de proa que se va perdiendo.
Y las olas rugientes que me llaman a gritos,
intentando arrancar la negrura que desprendo,
agitándose ante mí, estandarte baldío.

Ojala que la brisa se volviese tornado,
destruyendo esta imagen,
de negro aciago.

—de Tu voz poeta

Idoia Mielgo Merino_firma

Leave a Reply